La versión teatral de Orlando llega a las tablas de la mano de Toneelhuis. Tal y cómo contó Virginia Woolf, la pieza recorre la historia de Orlando desde la época isabelina, pasando por la victoriana hasta el 11 de octubre de 1928 llevando su libro El roble escondido en el pecho.
Orlando es un joven caballero que se transforma mágicamente en mujer e intenta durante siglos dar luz a su obra. Su condición de “sexo débil” y las épocas en las que vive se lo pondrán muy difícil para subsistir con dignidad y saber realmente quién es.
En escena se encuentra Katelijne Damen, adaptadora de una de las novelas más importantes de la literatura inglesa y única actriz del espectáculo. Interpreta a una biógrafa (un rol muy parecido al que tiene en la realidad) y es la responsable de conducirnos en este viaje mediante la narración. Todo ello, acompañado por un complejo sistema de videoproyecciones emitidas en directo tras capturar los movimientos de la actriz y la posición de unas láminas del suelo formando un juego calidoscópico en pantalla.
El director Guy Cassiers decide que la asombrosa historia de Orlando huya del código teatral homenajeando el ejercicio paródico de Woolf en construir una biografía. Todo es contado con la misma intensidad y nada es representado. Aquí reside uno de los grandes riesgos de esta puesta en escena pero que, a mi modo de ver, están perfectamente justificados no sólo por Woolf sino teniendo en cuenta la crisis del drama. ¿Cómo se puede enfrentar un director al momento en el que Orlando se acuesta como hombre y se despierta mujer? Puede que existan muchas vías pero no se puede negar que la novela propone grandes retos al ser representada. La opción de narrar esta historia supone también construir una mirada del emisor mucho más objetiva que consiga una poliperspectiva en su audiencia puesto que todos los episodios de la vida de Orlando se muestran con la misma importancia y es el espectador el que da valor a un momento u otro.
Pero, por supuesto, esta delicada puesta en escena tiene como principal objetivo ensalzar la literatura con un lenguaje virtuoso. Es una lástima que la lírica no llegue del todo a las butacas de la Sala Verde de los Teatros del Canal por tener que estar continuamente leyendo y sin poder disfrutar completamente de la valiente Damen conquistando palabra a palabra en neerlandés.
Teatro: Teatros del Canal
Web teatro
Autor del texto: Erwin Jans
Dirección: Guy Cassiers
Intérprete: Katelijne Damen

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