Ediciones La Cúpula nos ofrece, con el buen gusto y cuidado habituales, la posibilidad de disfrutar de esta excelente novela gráfica que nos retrotrae a los tiempos en que el feminismo luchó con denuedo por el sufragio universal. Sally Heathcote sufragista combina de modo ejemplar el rigor histórico con un apasionante drama de personajes, capaz de conmover al lector con una narrativa poderosa y llena de imaginativos recursos visuales.
Los aficionados al cómic conocen de sobras a Bryan Talbot, un versátil guionista y dibujante capaz de poner su talento al servicio de franquicias como Juez Dredd, firmar una novela gráfica de Alicia en las maravillas o crear un verdadero drama social en versión secuencial como el imprescindible El cuento de la rata mala. En esta ocasión Talbot pone su talento al servicio de su mujer, Mary M. Talbot, académica de prestigio internacional especializada en los estudios de género, que debuta en el medio con esta excelente novela gráfica que revisa la historia de las pioneras de la lucha por los derechos de la mujer, con la complicidad de Kate Charlesworth, autora de cómic e ilustradora habitual de medios como The Guardian.
Talbot sintetiza la lucha sufragista en la figura ficticia de Sally Heathcote, una trabajadora doméstica al servicio de Emmeline Pankhurst, una de las fundadoras del movimiento, que irá tomando conciencia de su identidad y terminará formando parte activa de la causa para reclamar el voto de las mujeres. Para ello, sus autores despliegan un impresionante fresco histórico que combina de forma brillante la historia con mayúsculas con el relato intimista, mediante una puesta en escena de textura cinematográfica. Sally Heathcote podría ser un notable biopic en blanco y negro al que los Talbot y Charlesworth añaden unas oportunas notas de color. Pero en realidad es mucho más que eso. Sufragista es también un vigoroso ensayo fértil en ideas que incluye anotaciones, bibliografía y una muy útil cronología.
La novela gráfica consigue comunicar el entusiasmo de las protagonistas, y diría que también parte de su espíritu ácrata y libertario. Su lucha resuena hoy como el inicio de un camino aún no completado, que a la vez sirve de acicate para un ciudadano deprimido ante un progresivo saboteo de sus derechos fundamentales. La primera aparición de Helen Millar Craggs en sede judicial y en el inmediato flashback en el que arroja un hacha y lanza un puñetazo a un par de hombres define a la perfección el carácter contundente del relato. Talbot consigue comunicar toda la crudeza del enfrentamiento a través de las experiencias de Sally que incluyen la prisión y las huelgas de hambre, de un modo dramáticamente poderoso, algo que probablemente no habría conseguido de igual forma en un ensayo. Sin embargo, la novela gráfica destila el rigor académico preciso para la historia, lo que proporcionará algunas sorpresas a los que tengan voluntad de profundizar en este fascinante periodo histórico. Sufragista es ya un clásico del cómic documental que vale la pena conocer. Aunque esté basado en un personaje de ficción, su lectura nos permite acceder a una realidad del pasado que además nos interpela respecto a nuestro propio presente.
Editorial: La Cúpula
Web editorial
Páginas: 226
Precio: 22,90 €
Guión: Mary M. Talbot, Bryan Talbot
Dibujo: Kate Charlesworth
Formato: 16 x 22,5 rústica, color
ISBN: 9788415724957

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