El cómic negro ha sido siempre un género difícil. Representar la tensión narrativa de una historia oscura y retorcida sobre el papel con una expresión en la que los matices están fijados en tinta ha sido siempre muy complicado.
Mattias Lehmann usa dos de los recursos más comunes de este género negro en el cómic “La Favorita”: El dibujo en blanco y negro y el linograbado, usados anteriormente con éxito por gente como Charles Burns y Art Spiegelman.
Su protagonista, Constance, es una niña peculiar, custodiada por una abuela dominante y un abuelo pusilánime al que le es más fácil esconderse en la bebida que enfrentar las rarezas de su esposa y sus tendencias al sadismo.
Enfrentada a la soledad de un caserón de una familia venida a menos, educada por su abuela en la más absoluta soledad, Constance presenta un cuadro típico de crueldad infantil frente a su educadora, sin atreverse a rechistar y buscando refugio en su imaginación enfebrecida.
La soledad utópica se rompe con la llegada de una familia a la vieja casa solariega. Esto hace añicos la tranquilidad de la disfuncional Constance y desencadena un final sorprendente, digno del mejor de los directores clásicos del cine negro más conservador.
En “La Favorita”, la fuerza del dibujo está siempre por encima de la historia. Con su potencia y carácter, acentúa el dramatismo de los momentos centrales de la trama. La excepción son precisamente los dos momentos de clímax argumental donde la historia parece que finalmente va a pasar a dominar el hilo narrativo. Pero en general, ese exceso gráfico penaliza el dinamismo narrativo de la historia.
Tardamos mucho tiempo en averiguar el secreto más íntimo de Constance, tardamos demasiado en conocer la historia de la familia D’Octeville y de todas sus miserias, tardamos mucho en descubrir el impacto de los recién llegados a la historia.
Sin embargo, tardamos muy poco en llegar a la conclusión final, como si toda la contención narrativa se desbordara en las últimas páginas de la historia, en un exceso de presentación de conclusiones y consecuencias.
El conjunto que nos deja “La Favorita” es muy positivo y abre una esperanza de ver si estamos ante la aparición de una nueva personalidad en la escena de la novela gráfica negra, una vez haya pulido la relación entre la dinámica narrativa y la fuerza del dibujo. Estaremos atentos.
Editorial: La Cúpula
Web editorial
Páginas: 168
Precio: 15,50 €
Guión: Matthias Lehmann
Dibujo: Matthias Lehmann
Formato: Rústica, 17x24, Blanco y negro
Edición Original: La Favorite
ISBN: 9788416400232
Hacer Comentario