Después de “La sang és més dolça que la mel”, con la que ganó el 1er Premio Memorial Agustí Vehí-Villa de Tiana, Josep Torrent se aleja de la novela policial temporalmente para presentarnos una de judicial, un subcorrent más de la llamada novela negra, bien emparentada y cercana a las narraciones de Erle Stanley Gardner o John Grisham.
Cuando le dijeron a Esteban que habían acusado a su amiga Julia de haber asesinado a cuchilladas a su ex pareja, no se lo podía creer. El juicio está a punto de comenzar: una sala abarrotada, periodistas a raudales, una magistrada, un fiscal contundente, un abogado inexperto, unos miembros del jurado bien exigentes y todo un guirigay de gente curiosa en un pleito después de año y medio de investigaciones y pruebas. Todo un proceso judicial de cinco días repletos de testigos y de declaraciones confusas, informes y documentaciones que se espera que hagan justicia. Pero … serán suficientes para demostrar la inocencia o culpabilidad de la acusada?Qué se puede esperar de todo este litigio?
Torrent sienta al lector en la primera fila de este proceso judicial contra Julia. “La noia que fa vint mesos que és a la presó” tiene como escenarios principales la antigua audiencia de la Casa Pastores y la prisión de Girona. Torrent nos hace vivir el juicio de una joven acusada de haber matado a su ex compañero cuando la estaba violando. No existen pruebas de la violación y, en cambio, sí hay testimonios de amenazas por parte de ella. Las cosas no pintan bien para ella.
Tal y como hace Esteban, el amigo fiel de Julia, página a página se asiste al juicio de cinco días y escucha las intervenciones del juez, el fiscal, el abogado defensor, el forense, etc …
El libro de Josep Torrent es una potente reflexión sobre la justicia, de cómo puede ser de eterno el tiempo de espera de un juicio o como puede variar la suerte de uno si tiene suficiente dinero para pagar o no un buen abogado. En “La noia que fa vint mesos que és a la presó” también hay un espacio importante para la amistad. Esteban, un antiguo amigo de la protagonista, estará a su lado en todo momento, prescindiendo de su vida anterior y luchará para demostrar la inocencia de Julia sin desfallecer.
“La noia que fa vint mesos que és a la presó” es una novela corta pero intensa. Torrent pone al lector en una posición donde es inevitable no sentirse un poco protagonista, un miembro más del jurado popular y analizar cada uno de los datos que le dan y posicionarse. También permite imaginar la angustia que supone un proceso judicial, tanto para el que espera la sentencia como para su familia y amigos. Una justicia imperfecta y que, lamentablemente, no mira igual al rico que al pobre.
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