Han vuelto Eels. O mejor dicho, ha vuelto Mark Oliver Everett, con su 11 trabajo más personal que nunca. “The Cautionary Tales of Mark Oliver Everett” es un álbum de habla de sí mismo para sí mismo; un experimento autobiográfico en el que Mr. “E” ha querido compartir con sus fans algo exquisito que puede que solamente los más receptivos puedan entender.
Llevo una semana escuchando “The Cautionary Tales of Mark Oliver Everett” pero no sé a qué suena. Me atrevo a decir que este álbum no es de Eels, sino apenas de uno de ellos, de Everett. No tengo dudas de que su voz cruda y sufrida es indisolublemente una gran referencia. Es única y a todos nos ha tocado alguna vez en lo más íntimo de los sentimientos.
Apenas ha pasado un año desde el “Wonderful Glorious”, un trabajo bastante valorado por los más críticos. Y todavía con esa resaca del último álbum de “su banda”, Everett volvió porque tenía ganas de contarnos lo que le pasaba por la mente. Todas las canciones tienen un sentido y todas ellas cuentan una pequeña historia. Historias que vienen de lejos, otras que pueden que sean huérfanas de personajes.
Todo empieza con “Where I’m at”, uun instrumental repleto de esperanza, o puede que sea tristeza, o puede que no sea más que eso, un instrumental. “Parallels” nos lleva a esa melancolía que Eels nos enseñó a disfrutar con el trabajo lanzado en 2001 “Souljacker”. La primera parte del álbum sigue con “Lockdown hurricane”, y “Agatha Chang” donde es como si nos estuviera cantando al oído. Me doy cuenta de que el ritmo se mantiene inalterado y las canciones acaban y empiezan sin que uno se dé cuenta.
Después de “Where I’m from”, todo parece que empieza con otro ritmo, pero en el momento que suena “Series of Misunderstandings” vuelve otra vez a ese sentimiento existencial, introspectivo, rozando lo depresivo. E continúa así con “Dead Reckoning”, un reclamo impotente donde no hay respuestas, apenas vagas metamorfosis vitales. “Mistakes of my youth” es un tema que se repite en su belleza por su letra “I can’t keep defeating myself”, “I can’t keep repeating the mistakes of my Youth” y su organización musical muy propia de Eels.
Puede que este sea el trabajo que más me ha costado entender de Eels, puede que incluso no haya llegado a entenderlo. Pero estoy seguro de que Mr. E lo que pretende con todo esto es causar esta sensación existencial que todos tenemos pero pocos se atreven a pronunciar per miedo a ser malinterpretados. “The Cautionary Tales of Mark Oliver Everett” es un álbum para ser leido y escuchado, que nos hace preguntarnos dónde estoy, de dónde vengo y a dónde voy.
Hacer Comentario